Fe de erratas: Antes de comenzar la sección, quería realizar una corrección con la tercera nota de Las Manos de Dios. En esa oportunidad el elegido había sido Hilario Navarro, al que propuse para la selección paraguaya y cometí el error de cambiarle la nacionalidad.
Si bien el jugador nació en Corrientes, tuvo un paso exitoso por el país guaraní. Por eso comenté que Martino, que ya colocó a varios argentinos en el combinado sudamericano, quizás levantaba el teléfono.
Hecha la aclaración, presento al mejor de este décimo segundo capítulo del Apertura. Esta vez el premio es compartido entre Marcelo Barovero y Agustín Orión.
Ambos jugadores se vieron las caras en el José Amalfitani en un duelo con mucha expectativa porque enfrentaba al líder, Estudiantes, contra su perseguidor, Vélez.
Y los dos estuvieron a la altura de las circunstancias. Con las vallas menos vencidas del campeonato, tanto Orión como Barovero no recibieron goles y aparecieron cuando fue necesario.
En la primera parte, Orión contuvo en dos tiempos un remate de Ricardo Álvarez. Y sobre el final de esa etapa también Barovero respondió ante un centro de Enzo Pérez.Con pocas opciones de gol, tanto el león como el fortín afrontaron el complemento.
A los 11 del segundo tiempo, Orión mostró su capacidad de reacción ante un desborde de Juan Manuel Martínez. El ex San Lorenzo cubrió el primer palo y cuando el delantero de Vélez sacó el centro a ras del piso, se quedó con la pelota sin dar rebote.
Por su parte, Barovero tuvo la más difícil del encuentro. El reloj marcaba 37 minutos y Estudiantes tenía un tiro libre a favor a pocos metros del arco de Vélez. El centro fue conectado de cabeza por Federico Fernández y el uno reaccionó a tiempo.
El jugador del equipo local realizó dos pasos para atrás, clavó los pies sobre la línea y balanceó su cuerpo hacia la derecha para evitar la victoria del león.
Ambos fueron prolijos durante todo el partido y demostraron porque atajan en los dos mejores equipos del fútbol argentino.
Las Manos de Dios Extra: José Manuel Pinto, arquero del Barcelona, fue noticia en los medios del mundo. En el partido que su equipo enfrentó al Copenhague por la Champions League simuló el pitido del árbitro cuando César Santin, jugador del conjunto dinamarqués, iba directo hacía el arco para enfrentarlo. El brasileño detuvo la carrera y perdió la ocasión de gol. Ante esta situación, la UEFA sancionaría al futbolista del equipo culé. Esta vez, el protagonista no fue ni Lionel Messi ni Andrés Iniesta sino el uno blaugrana.
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